18 de agosto de 2010

Orgullosa de ser yo.

Hay días en los cuales me hacia preguntas si valía la pena, si valía la pena todo el esfuerzo que daba en todas mis actividades, seguir con mis "sueños", los cuales muchas veces se veían opacados por las presiones sociales, falta de motivaciones, en fin, lo admito, como todas las personas tengo eso días en las cuales dudas de tus fuerzas, pero en el fondo de mi ser siempre estaba esa pequeña esperanza, donde siempre me recordaba a mi misma - No hay mal que por bien no venga- una y otra vez me lo repetía, hasta que se convirtió en mi frase (adoptada). Y no me da pena hablar de mis penas, a todos nos pasan cosas malas, unos las mitigan con alcohol, otros se hunden en ellas, y vaya... miles maneras de fingir una cara feliz, sin embargo esta la gente que con lagrimas sobre las mejillas, los ojos hinchados de tanto llorar, derramando mas lagrimas de las que imaginaron que tenían, con miles de decepciones, ene cantidades de malos ratos, solo pocos osan el continuar...solo continuar, por ejemplo: En mi persona me ha servido bastante el habito del orgullo, en pocas palabras puedo toleran golpes de la vida y sigo como si nada paso, me tragaba mi dolor, hasta que alguien me dijo " No mitigues el dolor, súfrelo, para que veas si lo quieres volver a sentir" . Diatres, era tiempo de enfrentar consecuencias, sin embargo opte el enfrentar la vida, yo y mi orgullo, bendito o maldito orgullo, pero a veces eso me mantiene de pie, porque cuando digo " juro que..." , algo en mi interior me hace doblegar, sin embargo es mas fuerte mi mente que mi corazon, y continuo, aun con lagrimas, pero continuo...

Y ahora... que me doy cuenta que cuando me propongo algo lo puedo hacer, solo cuestión de perseverancia, paciencia, y buena concentración mental, es cuando dejo afuera la factor"corazon" . He conquistado un sueño, y aun faltan mas...

Lo admito, una vez llore, llore por horas, desgarraba mi alma, casi pensé que la vida me castigaba por algo, que todo el universo se había olvidado de mi, sentí la soledad aun rodeada de tanta gente, me sentí... nada, y no comprendía porque, no sabia porque debía de sufrir tanto, que me quería enseñar con esto la vida, que había frente a mi que no veía; Y ahí mi orgullo me salvo, me jure a mi misma que jamas nada me haría sentir así, armada con un valor jamas conocido en mi, me levante, Hoy, comprendo que todo paso por algo, era cuestión de conocer mi fuerza interna, salir de mi caparazón, dejar de ser espectadora de la vida para ser una protagonista, este año ha sido solo de transición, la vida me esta guiando por mi camino correcto, se que habrá barreras, mas ahora tengo las herramientas para superarlas, y si adelante llegase a caer abrupmanente, basta con leer esto, recordar ese día, y saber que puedo con esto y aun con mas.